El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha puesto de ejemplo de inversión extranjera en la Comunidad a la empresa farmacéutica GSK asentada en la localidad burgalesa de Aranda de Duero.

Herrera, quien ha visitado las instalaciones de la multinacional con motivo del 40 aniversario de su presencia en la villa arandina, ha destacado los beneficios que su actividad ha producido tanto para la propia empresa como para el territorio.

Juan Vicente Herrera, quien ha recordado en su intervención que la planta ha pasado de los 68 trabajadores iniciales a los cerca de 600 actuales, ha remarcado la capacidad de la firma en materia de internacionalización hasta convertirse en un "referente mundial" con algunos de sus fármacos, como es el caso de Ventolín.

Asimismo, ha subrayado la importancia de que GSK haya aprovechado de una forma "extraordinaria" el entorno empresarial que ofrece Aranda de Duero hasta convertirse en una de las fábricas más productivas del ámbito químico-farmacéutico de toda España.

En este sentido, el presidente de la Junta ha explicado que la planta de Aranda de Duero representa en la actualidad un centro de referencia para la compañía, que además la considera como una factoría clave para el lanzamiento de nuevos productos en forma de comprimidos para el tratamiento de distintas enfermedades, como el VIH.

Según ha explicado Juan Vicente Herrera, en un sector como el químico-farmacéutico, nada de esto habría sido posible sin una "apuesta continuada y estratégica" por la innovación como motor de crecimiento.

Juan Vicente Herrera ha concluido su intervención recordando el apoyo de la Junta a GSK en Aranda de Duero a lo largo del tiempo, cuando se han materializado inversiones por un importe total de 18 millones de euros.

Un apoyo que continúa en la actualidad, puesto que el pasado mes de agosto el Consejo de Gobierno declaró de especial interés el Plan Estratégico I+D presentado por la firma para la planta burgalesa, que contará con un respaldo de 600.000 euros.