La generación dorada de España sigue brillando: entre consolidaciones, lesiones, fichajes millonarios y el adiós de leyendas, el presente de los héroes de Berlín
El Ferrari F2001 de Schumacher rompe récords y se corona como el más valioso jamás pilotado en F1
Subastado por 15,9 millones de euros en Mónaco, el mítico monoplaza de la Scuderia se consagra como una joya histórica del automovilismo
El Ferrari con el que el expiloto alemán Michael Schumacher ganó el Gran Premio de Fórmula 1 en Mónaco y se coronó como campeón mundial en 2001 se subastó este fin de semana por 15,9 millones de euros en el Principado, según informó la casa de subastas británica RM Sotheby's.
Este F2001 hizo historia este sábado al ser el primer coche de F1 en subastarse durante la clasificación del Gran Premio de Mónaco y estableció un récord al convertirse en el vehículo más caro de F1 conducido por el piloto, tras superar los 11,6 millones que un postor pagó por el Ferrari F2003 en 2022.
Asimismo, se convirtió en el cuarto coche de F1 más caro jamás vendido. El récord mundial lo ostenta el Mercedes W196 pilotado por Juan Manuel Fangio y Stirling Moss en la década de los 50, que se subastó a comienzos de este 2025 por más de 45 millones de dólares.
Schumacher, de 56 años, condujo el F2001 en su última victoria en el Gran Premio de Mónaco, a la que posteriormente le siguió otra en el Gran Premio de Hungría que le aseguró su cuarto título mundial del F1.
Apodado por RM Sotheby's como 'La joya de la corona' del expiloto alemán, el F2001 fue ideado por el 'superequipo' de la Scuderia formado por Jean Todt, Ross Brawn, Rory Byrne y el propio Schumacher.
El automovilista sufrió una lesión cerebral grave en diciembre de 2013 tras un accidente de esquí y estuvo en coma inducido hasta 2014, cuando fue trasladado a su domicilio para recibir tratamiento y rehabilitación privada. Desde entonces no ha aparecido en público.
El corredor del Lidl se impone en Laval y estrena su palmarés en la ronda gala; Pogacar mantiene sin cambios el liderato
Luis Enrique y Maresca se miden en una final de alto voltaje entre proyectos millonarios, estilos gemelos e idea de marcar una época
El murciano y el italiano elevan su rivalidad en la Catedral del Tenis por el trono de Wimbledon