El asesinato de Silvia Plaza, una burgalesa de 34 años, a manos, presuntamente, de su expareja, ha vuelto a sacar a la calle a miles de burgaleses y burgalesas que han mostrado su más enérgica repulsa hacia la violencia machista en una concentración que ha derivado en una manifestación hacia el lugar donde ocurrió todo. 

En un principio, la concentración estaba convocada a las 20 horas en la Plaza del Mío Cid, donde autoridades municipales, como el alcalde, Javier Lacalle, el subdelegado del Gobierno, Roberto Sáiz, o el gerente regional de Servicios Sociales, Carlos Raúl De Pablos, han expresado su consternación ante lo sucedido y su apoyo a la familia de la víctima. 

Seguidamente, los colectivos feministas han emprendido un camino hacia la calle Santander para girar en la Plaza España y enfilar la calle Vitoria en dirección a Gamonal. Y es que, en ese momento, se ha decidido recorrer la principal arteria de la ciudad para terminar en el lugar donde ocurrieron los hechos, la calle de San Antón, en plena barriada de la Inmaculada. 

Allí, y en todo el recorrido, se han escuchado gritos contra el machismo, como "no se mueren, son asesinadas", o un rotundo "no tenemos miedo". Por último, se ha leído un manifiesto en contra de este tipo de agresiones mahistas y se ha solicitado más protección hacia las víctimas. Burgos, nuevamente, ha dicho basta ya.