Se enfrentan a penas de prisión de entre 4 y 8 años
La búsqueda del salmantino desaparecido se hace extensible a Zamora y Ávila
Durante el puente de La Constitución se han llevado a cabo nuevas batidas en Zamora y Ávila por puntos claves.
José Antonio Martínez Bolos lleva desaparecido desde el pasado miércoles 14 de noviembre en Salamanca y a pesar de las intensivas búsquedas llevadas a cabo por Policía Nacional y Local, Bomberos, Protección Civil y las innumerables batidas familiares, por el momento no hay ni una sola pista que pueda esclarecer los hechos. Por ahora, la búsqueda se ha hecho extensiva a toda Castilla y León, han estado en este puente de La Constitución, en Ávila y Zamora.
La estación de autobúses, comedores sociales y calles céntricas han sido algunos de los puntos claves de esta búsqueda. La intención de los familiares es no parar de buscar y llegar a los medios nacionales para organizarse mejor y así hallar alguna pista que pudiera dar con el paradero del desaparecido.
Por el momento, la Policía Nacional mantiene su web la búsqueda del charro. Es más, cuando haces clic para acceder a dicha página, el primer desaparecido que aparece es José Antonio. En ella, y tal y como se puede ver en la foto que se adjunta a esta noticia, desde el cuerpo solicitan colaboración ciudadana, indicando su fotografía y algunos números de teléfono por si alguien le viera: 923 12 77 87 / 792 / 793.
Bolos, fue visto por última vez con una cazadora verde por la zona de la calle Azafranal (Salamanca) mientras paseaba con su mujer. Cabe destacar que padece alzhéimer. Los familiares del señor, de 72 años, han solicitado la colaboración ciudadana y han informado que mide 1.76 metros de estatura.
Para evitar ser identificados robaban de madrugada y usaban un extintor para borrar posibles huellas, al tiempo que huían en vehículos robados de alta gama
El hombre, de 63 años, sufrió picaduras en el rostro que le provocaron dificultad respiratoria y pérdida de conciencia
Tras varios intentos de intervención por parte la tripulación del copiloto, se negaron a cesar en su conducta y fue necesario llamar a la Guardia Civil